¡Ay Madrid! ¿Por dónde empezar? 🇪🇸 La tierra de C. Tangana, el madrileño por excelencia; la tierra que vio nacer a Jorge Drexler como cantante, un lugar que ya había conocido a través de la música y que gracias a mi maestría en Gestión de Proyectos en EOBS pude finalmente conocer en persona. 🎓
Me gustaría comenzar este blog contándote que, debido a que era un viaje tan largo y no podía llevar tanto equipaje, me decidí por llevar mis Chunky Chelseas 👢, lo cual fue la mejor decisión porque, literal, las usé cada día durante mi estadía en esta ciudad mágica. ✨ Además, me llevé mi tote bag del tráfico 👜, que me sirvió muchísimo, ya que en los supermercados de la mayor parte de Europa no dan bolsas plásticas, así que me vi cool todo el tiempo 😎, aun cuando iba a comprar verduras. 🥦
Como ya sabrás de blogs anteriores, soy fan de cualquier ciudad caminable 🚶♀️. El hecho de poder caminar libremente es un lujo que mucha gente que no viene de países como el nuestro subestima. Me hospedé en el barrio La Latina, lo cual fue una gran decisión porque pude ir a pie hacia todos mis destinos y tenía una estación del metro 🚇 muy cerca que me llevaba directo a la universidad.
La experiencia de estudiar en Madrid fue todo lo que imaginé y más. 🎓 La EOBS me permitió conectar con profesionales de todo el mundo, intercambiar ideas y aprender de primera mano sobre la gestión de proyectos en un entorno internacional. Tener la oportunidad de discutir teorías de negocio mientras disfrutaba de un café ☕ en una terraza madrileña hizo que cada día fuera un sueño hecho realidad.
Madrid tiene una magia especial, y no solo por su historia o su arquitectura impresionante 🏛️, sino por la forma en que te envuelve. Sus calles adoquinadas, la vibrante Gran Vía iluminada de noche 🌃, los mercados como San Miguel llenos de sabores y colores 🥘, y la calidez de su gente hicieron que cada momento fuera especial.
Una de mis partes favoritas del viaje fue simplemente perderme por Malasaña y Chueca, descubrir pequeñas boutiques y cafeterías llenas de encanto. 🛍️ Y claro, visitar el Museo del Prado y finalmente ver en persona obras que había admirado durante años. 🖼️ También tuve la oportunidad de asistir a un pequeño concierto de flamenco 💃 en un bar escondido, y esa combinación de música y pasión quedó grabada en mi memoria para siempre.
Mis Chunky Chelseas pasaron la prueba con honores. 🎖️ Caminé kilómetros todos los días sin sacrificar comodidad ni estilo, y si algo aprendí en este viaje es que invertir en un buen par de zapatos hace toda la diferencia. Desde las frías mañanas hasta las noches de tapeo 🍷, fueron mis compañeras perfectas.
Madrid me dio mucho más de lo que esperaba: crecimiento académico 📚, inspiración, nuevas amistades y recuerdos que atesoraré por siempre. No fue solo un viaje, fue un capítulo inolvidable en mi historia. Y aunque ya haya partido, una parte de mí se quedó allá, entre sus calles, su arte y su pasión por la vida. ❤️
¡Hasta pronto, Madrid! Estoy segura de que volveremos a encontrarnos. ✈️
